Santa Cruz. Así lo consideró el secretario adjunto de AOMA nacional, Carlos Almirón, al analizar la caída del empleo en el sector a pesar de la quita de las retenciones a las compañías que dispuso el Gobierno nacional desde principio de año. Afirmó que en Santa Cruz se viene recuperando de un mal 2015.
A poco de iniciada la nueva gestión del Gobierno nacional se dispuso eliminar retenciones a la minería, por lo que se pensó que podría mejorar la situación global de las empresas y de los trabajadores del sector.
Sin embargo, a escasos seis meses de este 2016, se conoció que la explotación de minas pasó de emplear 69.101 personas a 66.175, lo que implicó un descenso en el nivel de empleo en ese rubro de 4,2%.
En su conjunto echaron a 19.422 trabajadores durante los primeros tres meses del año, según las cifras oficiales.
Al respecto, el secretario adjunto de AOMA nacional, Carlos Almirón, indicó ayer a TiempoSur que mucha de la actividad minera está vinculada a proveer materiales para la construcción y ésta ha tenido un parate muy fuerte, al igual que la obra pública también.
Precisamente, en cuanto a la construcción a nivel nacional, también se supo que hubo una contracción del 6,7 por ciento y 42.031 puestos de trabajo menos frente al primer trimestre de 2015. Ambas actividades son de las más importantes de Santa Cruz.
Achiques presupuestarios- Almirón inició explicando que esta paralización en la construcción “evidentemente ha generado que (las compañías) tomen sus recaudos, como reducción de horas extras, procedimientos preventivos de crisis, y diversas modalidades para ir atenuando los costos y poder ir cumpliendo con las necesidades”, expresó.
Pero también admitió que hay otros sectores como los prestadores de servicios a las mineras que también han tenido un marcado descenso de la actividad y por ende del empleo. “Indudablemente son las primeras que sufren las consecuencias del achique presupuestario que hacen las empresas”, dijo.
Políticas activas- Asimismo, sostuvo que lo que también está faltando es gestión de gobierno y puso como ejemplo lo que pasa en Jujuy con un yacimiento que se está terminando, con fecha de cierre este año, mientras hay otro yacimiento que la política no ha gestionado la posibilidad de ubicar esos puestos de trabajo que absorberían de alguna manera esta mano de obra que quedaría desocupada.
Para cualquier economía como la de Jujuy, Catamarca o Santa Cruz, en caso de ser afectada por la posibilidad del cierre de una minera, son muchos los puestos de trabajo que se pierden, por lo que invitó a los gobierno a “generar políticas activas para que puedan ponerse en valor los yacimientos que ya están experimentados y a los que ya se les ha hecho exploraciones y tienen posibilidad de desarrollo”.
En cuanto a la minería extractiva metalífera como la que tenemos en Santa Cruz, Almirón sostuvo que la caída de los precios internacionales puede ocasionar dos cosas: imposibilita poder seguir obteniendo mejores salarios para los trabajadores; y por el otro, genera también que a las empresas no les convenga producir ya que tienen un precio del comoditi barato y no les conviene sacar el mineral.
Finalmente, sobre Santa Cruz, sostuvo que el año pasado se pasó por momentos complicados, pero dijo que este 2016 se mejoró, por lo que cree que no se está en una situación en la que se corra –aún- algún riesgo de pérdida de fuentes laborales.
Peralta, duro con las mineras
El ex gobernador Daniel Peralta utilizó la red social Twitter para criticar ayer a las empresas mineras: “La minería con retenciones derogadas a nivel nacional y sin impuesto minero en Santa Cruz, con el oro a 1.500 la onza” y se preguntó “¿Más puestos de trabajo?”.
Poco después, manifestó: “Mientras faltan recursos y los conflictos se profundizan, las mineras ‘entretienen’ con el ‘compre local’ ¿Cuánto creció el empleo en el sector?”, se volvió a preguntar en obvia alusión a un comunicado de prensa difundido ayer por CAPROMISA donde sostienen que se llegó a 1.000 el pedido de cotizaciones.
Tiempo Sur
