La tercerización de servicios es una modalidad que eligen muchas empresas de nuestro país. Su tendencia va en alza. Si bien tiene importantes beneficios como la mejora de resultados, la reasignación de recursos, el focalizar en el core business, variabilizar costos y la flexbilidad operativa, también hay que prestar atención a cómo reducir los riesgos que puedan llegar a surgir.
En América Latina, como en otras regiones del mundo, las empresas tienen responsabilidades derivadas de sus relaciones con contratistas y subcontratistas. En el caso de la responsabilidad solidaria en las tercerizaciones de Servicio, la problemática reside en la exposición a Riesgo de la empresa principal.
Cuando hablamos de riesgos, nos referimos a un riesgo derivado de las operaciones del contratista y otro del Marco Legal Laboral. Dentro de los riesgos operacionales del contratista podemos mencionar: los accidentes del personal de los contratistas y/o subcontratistas; la falta o inadecuada cobertura de seguros; la suspensión por falta de documentación; las multas por parte Entes Reguladores, el Incremento de la siniestralidad del propio negocio y el Incumplimiento de la propia normativa de Seguridad e Higiene.
Los Riesgos derivados del Marco Legal se refieren principalmente a lo establecido en el artículo 30 de la Ley de Contrato de Trabajo:
“LEY DE CONTRATO DE TRABAJO – ARTÍCULO 30 (Subcontratación y delegación -Solidaridad).Quienes cedan total o parcialmente a otros el establecimiento o explotación habilitado a su nombre, o contraten o subcontraten, cualquiera sea el acto que le dé origen, trabajos o servicios correspondientes a la actividad normal y específica propia del establecimiento, dentro o fuera de su ámbito, deberán exigir a sus contratistas o subcontratistas el adecuado cumplimiento de las normas relativas al trabajo y los organismos de seguridad social.
El incumplimiento por parte del contratista o subcontratista de algún requisito hace responsable solidario a la empresa principal.
El Riesgo de responsabilidad solidaria derivada de la tercerización de servicios es un riesgo corporativo que genera pérdidas económicas por siniestralidad pero a diferencia de otros riesgos asegurables, también genera pérdidas económicas por la reserva financiera contingente prevista en el balance y que impacta en el estado de resultados de la empresa principal, aun en ausencia total de siniestralidad.
El control documental que consiste en la verificación del cumplimiento normativo por parte del contratista es una acción de minimización y prevención de este riesgo, conforme lo establecido en el art. 30 de la ley de contrato de trabajo y en las mejores prácticas de Risk Management.
La tarea de control es un proceso complejo que debe implementarse en forma permanente durante la vigencia de la orden de servicio de cada contratista y eventuales subcontratistas.
Marcar la diferencia
A nivel mundial no existe un producto de Seguros que brinde una cobertura unificada a estos riesgos corporativos. Desde Artai Argentina, se creó el “Servicio de Auditoría y Control de Contratistas (SACC)” basado en la norma internacional de Gestion de Riesgos Corporativos ISO 31.000. La implementación del servicio Sacc garantiza importantes diferenciales respecto a otros productos ofrecidos en el mercado: adopción de mejores prácticas en la materia; software de última generación tecnológica que automatiza totalmente el proceso, prestaciones adecuadas a cada cliente; matriz de riesgo flexible; Work flow parametrizable, integración con sistemas internos del cliente; Risk Management y Coberturas de Seguros especificas asociadas al proceso de control.
Dentro de las mejores prácticas es necesario implementar procesos automatizados de control documental en cumplimiento de las obligaciones de contratistas conforme a lo establecido por la legislación laboral vigente, los Riesgos del trabajo, la Seguridad e Higiene y las propias normas de la empresa.
También se deben establecer estrategias particulares ante la contratación de Terceros y en el proceso de control para la realización de servicios asociados a la actividad normal y específica del propio negocio.
Definir y controlar claramente las coberturas de seguros de contratistas, aseguradores, cláusulas de subrogación, omisión de pago y modificación, es otro de los puntos controversiales, al igual que el monitoreo en forma sistémica el desempeño ante el proceso de control desde el enfoque de Risk Management, incluyendo análisis de exposición, probabilidad e impacto de riesgos.
En cuanto a la definición de particularidades de procesos sin afectar al negocio, hay que tener en cuenta: la diferenciación del proceso Logístico, los contratistas habituales, eventuales y ocasionales, el tratamiento de sub contratistas y el registro de Excepciones a no conformidades.
Instrumentar acciones ante el incumplimiento a través del sistema de control es otra práctica que se encuentra dentro del Servicio de Auditoría y Control de Contratistas como así también el introducir en las áreas de Compras Procesos de Certificación y Homologación de Proveedores.
Work flow parametrizable
El esquema mediante el cual se llega a la reducción de riesgo en el servicio de auditoría y control documental, comienza con el contratista que registra los documentos exigidos en el sistema web del Servicio de Auditoría y Control de Contratistas; luego los auditores controlan los requisitos y registran en el sistema SACC la conformidad o no conformidad.
En un tercer paso el sistema dispara automáticamente el envío del resultado de la evaluación al contratista y genera la acción ante incumplimientos definida por el cliente en la matriz de riesgo: inhibe el acceso de personas y vehículos no conformes y/o retiene el pago al contratista.
Por último el cliente ingresa a SACC o a través de su propio sistema integrado a SACC decide alternativas ante incumplimientos: no permite el ingreso a instalaciones de determinadas personas, vehículos y /o maquinarias en estado de “no conformidad”; considera el estado de vehículos y choferes en la programación logística de la organización; aplica de acuerdo al caso coberturas de seguros adicionales y complementarias y selecciona y evalúa al contratista considerando esta información.
Si bien la tercerización es una tendencia que tiene muchos beneficios para las empresas, también se corren riesgos al establecer este tipo de relaciones laborales. Por esta razón se deben implementar herramientas que logren reducir los riesgos al mínimo. Cuantos más contratistas pueda a llegar a tener una empresa, mayor complejidad se suma a la administración de las tareas que se involucran con la tercerización.
Monitorear y controlar son palabras claves para realizar un seguimiento adecuado en la gestión diaria con los contratistas, ya que son cada vez más las empresas que necesitan mejorar en este sentido para garantizar una cadena de valor sustentable.
