El ministro Juan José Aranguren participó en Mendoza del despacho, en el marco del proyecto de extensión de vida de la Central Nuclear de Embalse en la provincia de Córdoba, «que permitirá dar energía para más argentinos».
«Este nuevo gobierno tiene la obligación de decir la verdad y la verdad es que estos últimos años hemos perdido la oportunidad de desarrollar trabajo nacional y lograr mejoras en la productividad. Y un país rico en recursos como lo es Argentina, tanto fósiles como renovables, se ha dado el lujo de importar el 30 por ciento de la energía que necesita lo que es un crimen», lamentó el ministro.
Acompañado por el gobernador Alfredo Cornejo, Aranguren resaltó que este lanzamiento industrial «permite que Embalse se repotencie, nos dé energía nuclear por treinta años más y así podamos estar dando energía argentina para más argentinos que es nuestro objetivo».
Asimismo, destacó la capacidad que hoy hay en el país «tanto desde el punto de vista del liderazgo como del personal, para poder contribuir al desarrollo de toda nuestra sociedad y así generar nuestra propia energía y cada vez más barata que es el objetivo de esta nueva administración».
La fabricación de estos Generadores de Vapor es un hito importante para la industria nacional ya que todo el equipamiento se realizó en la Nave Nuclear de IMPSA, la más avanzada en Latinoamérica, para la extensión de vida de la central nuclear de embalse, la segunda en potencia de la Argentina.
IMPSA recordó en relación al equipamiento despachado hoy que las centrales nucleares son diseñadas para un período de treinta años de vida útil, y luego de ese lapso se realiza un análisis exhaustivo que, si está en buenas condiciones, la Autoridad Regulatoria Mundial va extendiendo los plazos tal como ocurrió hoy con esta renovación de equipamiento por otros treinta años.
Aranguren se refirió también a la controversia por el incremento en las tarifas energéticas y reiteró la posición del gobierno nacional de que «mientras se espera la respuesta de la Cámara Federal de La Plata o de la Corte Suprema, aquel que pueda pagar la factura vaya pagándola aunque sea parcialmente porque cuando vuelva la refacturación, algunos casos tendrán nota de crédito o no».
«Pero el hecho específico es que tenemos que reconocer que, para que haya energía, hay que recomponer el valor que todos pagamos», afirmó.
En un contacto con la prensa, Aranguren dijo que se ha dado un incremento «gradual» ya que en materia eléctrica los aumentos sólo significan un recupero del 35% del costo que significa producir electricidad y el otro 65% lo pagamos todos los argentinos a partir de déficit y la inflación», mientras que «en el gas estamos en el 55%».
«No vamos a dejar de importar energía porque somos un país integrado en la región, pero lo que si tenemos es la necesidad imperiosa de dejar de importar gas natural licuado. Y si hacemos bien las cosas, en cuatro o cinco años más podremos dejar de importar ese gas y desarrollar trabajo argentino en las provincias productoras de petróleo o gas que tienen el recurso pero necesitan estabilidad en las reglas de juego para hacerlo», remarcó.
El objetivo central del Gobierno «es que haya más energía porque ya no tenemos más capacidad para importar de los países limítrofes, este año ya tuvimos que hacer cortes rotativos y en el gas ya tampoco nos alcanza sino que lograr, a partir de los cambios de reglas de juego, que es volver a la base de regulación que establece un mercado regulado en transporte y distribución.
En tanto, Cornejo remarcó el orgullo de que «los mendocinos estemos en el centro de la creación de valor y que tengamos mercado donde venderlo», y afirmó que este resultado se debe al esfuerzo de la empresa, su gente y «con el apoyo del Gobierno está saliendo adelante».
«Una vez más los mendocinos debemos sentir orgullo de que desde nuestra provincia se logren estas cosas» y comprometió el apoyo de los Gobierno provincial y nacional para el crecimiento y desarrollo de la empresa y sus empleados.
Aranguren estuvo acompañado también por el presidente de Impsa, Enrique Pescarmona; el subsecretario de Energía Nuclear, Julian Galdano; y el presidente de la estatal NASA (Nucleoeléctrica Argentina), Omar Semmolini.
Télam
