Geotermia Andina presentó una oferta en la licitación de IPEEM. La empresa había comenzado a explorar hace algunos años y abandonó el proyecto. Por Viviana Pastor.
Geotermia Andina participó en la licitación de áreas mineras del Instituto Provincial de Exploraciones y Explotaciones Mineras (IPEEM) y ofertó por Despoblados 3,3 millones de dólares. Pero el interés de la empresa no es la minería, sino la producción de energía geotérmica que tiene gran potencial en la zona.
«Geotermia Andina estuvo asociada en UTE con Energía Provincial Sociedad del Estado (EPSE) y Barrick para explorar Despoblados. Pero pararon y esa UTE dejó de funcionar, desconozco los motivos. Ahora la firma quiere culminar lo que no pudo entonces con una perforación más profunda, de más de 1.000 metros porque la que hicieron en 2013 no superó los 500 metros”, explicó Juan Reus, vicepresidente de IPEEM.
La energía geotérmica es aquella que puede obtenerse mediante el aprovechamiento del calor del interior de la tierra, y en Despoblados el potencial es alto. Además el área está junto al camino que conduce a la mina Veladero, distante a unos 12 kilómetros hacia el norte.
En agosto de 2013 un grupo de periodistas visitó la zona junto al entonces gobernador José Luis Gioja, y el espectáculo era increíble. A unos 4.000 metros de altura, con la cordillera de Los Andes nevada y con temperatura bajo cero, el agua caliente brotaba hacia la superficie creando pequeñas lagunas y produciendo un espeso vapor.
El primer proyecto para la zona era la explotación turística con baños termales. Pero algunos estudios indicaron que había arsénico y otros componentes naturales del suelo que no eran buenos, por eso el proyecto viró hacia la investigación para explotar los vapores y transformarlos en energía.
En enero de 2013, la UTE inició perforaciones de la primera etapa para saber si allí es posible la generación de energía geotérmica, que se produce con el vapor del agua caliente de napas subterráneas. Pero el cronograma se suspendió en 2014 y no llegaron a la meta de los 1.000 metros de perforación.
Ahora Geotermia Andina quiere lograr más profundidad para medir la temperatura, para la generación de energía se necesitan 150º o más. La presunción es que habiendo obtenido 57º a 250 metros, es posible que los 150º se encuentren a menos de 1.000 metros.
«Creemos que Geotermia Andina logrará su plan de inversión antes de los 5 años establecidos y podrá seguir si encuentra resultados positivos”, aseguró Reus.
Cronología de Los Despoblados
1977
Enviado por Naciones Unidas, Giorgio Stangalino recorrió todo el Valle del Cura en busca de recursos geotérmicos, los resultados de esa prospección estuvieron entre los mejores, pero no había demanda para esa energía en la zona.
2005
EPSE dispone de los derechos para concretar la exploración y eventual explotación de un ámbito anómalo incluido dentro del área de reserva minera Los Despoblados, caracterizado por la presencia de manifestaciones termales y vertientes mineralizadas.
2006 a 2009
Se realizan investigaciones gracias a las que se pudo definir la génesis de las afectaciones que aquejan al Río Jáchal, presencia de boro, arsénico, sulfatos y cloruros en las aguas. Se delimitó una superficie de 2.300 Km2 con afloramiento de vertientes termomineralizadas.
2010
Se forma UTE EPSE-GEOTERMIA ANDINA dándose inicio a operaciones de geofísica en el área geotermal de Los Despoblados, sondeos eléctricos verticales profundos para confirmar los targets de interés geotérmico detectados y definir su geometría espacial.
2011
La participación de una misión geofísica de enfoque para prospección magneto telúrica permitió definir la existencia del foco profundo, sirviendo todo lo actuado para impulsar una campaña de sondeos de gradiente (en una primera etapa).
2012
Se formó UTE entre EPSE, GEOTERMIA ANDINA y MAGSA para el desarrollo conjunto de actividades de exploración y eventual explotación de vapores endógenos en el área de Los Despoblados, lo que se concretó en fecha 26 de Diciembre de 2012.
2013
Comenzaron las perforaciones de la primera etapa. Se realizaron cinco pozos de 250 metros, tres en la zona anómala, que indicaba el lugar del reservorio. Los resultados fueron «irrefutables”: las temperaturas llegaron a los 57º, lo normal es un aumento de 3º de temperatura 3° cada 100 metros.
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