Si los ocho estuviesen en funcionamiento, el 5% de la producción mundial de cobre pertenecería a la Argentina. Hay una mina en Mendoza que podría funcionar incluso con la Ley 7722 vigente.
En medio de la creciente demanda mundial de cobre debido a la expansión de las energías limpias, Argentina busca subirse a ese tren y aprovecharlo para incrementar sustancialmente las exportaciones. En ese contexto, sobresalen ocho proyectos con enorme potencial en el país, de los cuales uno está en Mendoza.
Estos ocho proyectos de minería de cobre que hay en Argentina están en diferentes etapas de desarrollo, y los especialistas calculan que en 2026 estará operativo el primero de ellos, con un saldo para ese año de u$s 814 millones. Se trata del proyecto MARA, ubicado en Catamarca, que integra Agua Rica con Bajo La Alumbrera.
Sin embargo, para 2027, aumentaría exponencialmente la capacidad exportadora, hasta los u$s 4.200 millones, con 4 proyectos adicionales. Y finalmente en 2031, ya con los 8 funcionando, se auspicia un ingreso de divisas de u$s 11.100 millones anuales; aunque habría que ver qué pasa en Mendoza con ese «octavo proyecto».
Se trata del proyecto San Jorge, en el departamento de Las Heras. Fue incluido entre los 8 más importantes del país en un informe de Ámbito, citando fuentes y estadísticas de la Secretaría de Minería de la Nación. Al respecto, afirmaron que San Jorge «está en etapa de prefactibilidad» y que prevé una «inversión inicial de u$s 370 millones».
A diferencia de cualquier otro proyecto metalífero de Mendoza, San Jorge ya tiene completa la etapa de exploración, ya que no existía la ley 7722 en Mendoza. Quedó pendiente la aprobación del impacto ambiental por una cuestión política (en 2011, en plena campaña, Paco Pérez ordenó a los legisladores peronistas rechazarla, tal como quería la UCR).
Por su parte, la secretaria de Minería de la Nación, Fernanda Ávila, advirtió que «reglas claras y previsibilidad son ejes centrales para estas inversiones, que sabemos que son de largo plazo y riesgosas». Justamente, es lo que no tiene Mendoza, en relación a reglas claras. De hecho, en diciembre de 2019 se modificó la ley minera y rápidamente se dio marcha atrás.
De todas maneras, San Jorge podría reactivarse con la 7722 vigente, ya que no se utilizará ninguna de las cuatro sustancias prohibidas, sino el xantato, una especie de «detergente» que separa el mineral de la roca en un proceso de flotación. También hay un plan B: llevar la roca vía tren a San Juan y procesarla allí con otros químicos.
-Josemaría. Es el único que inició la etapa de construcción, con una inversión de bienes de capital (capex) de u$s 4.100 millones. San Juan.
-El Pachón. En etapa de factibilidad. Capex de u$s 4.500 millones. San Juan.
-El Altar. En exploración avanzada. Capex de u$s 3.000 millones. San Juan.
-Los Azules. En PEA (Estudio Económico Preliminar) por u$s 2.363 millones. San Juan.
-Proyecto MARA (Agua Rica -Alumbrera). En etapa de prefactibilidad. Capex previsto de u$s 3.100 millones. Catamarca.
-San Jorge. En etapa de prefactibilidad. Inversión inicial de u$s 370 millones. Mendoza.
-Mina Taca Taca. En estudio preliminar por u$s 3.583 millones. Salta.
-Filo del Sol. Etapa de prefactibilidad. Costo de construcción de u$s 1.266 millones.
La Secretaría de Minería aclaró que El Pachón, Los Azules y Taca Taca sumados representan el 62% de las reservas de cobre del país, a la vez que su construcción y puesta en marcha demandarán unos u$s 10.000 millones.
Un dato importante: si los 8 proyectos estuviesen funcionando a plena capacidad, la participación argentina en la producción mundial sería del 5%, con un volumen de 1,2 toneladas anuales. A su vez, se duplicaría el valor exportado por todo el sector minero en su conjunto, en su mejor año.
Fuente: Memo
