Artesanas sanjuaninas que apostaron a los metales

 

Cecilia y Carolina Bueno son hermanas y socias. Ganaron un subsidio para la minería artesanal. Proyectan el primer salón de ventas de joyas 100 % locales.

Originales collares, aros, anillos y dijes creados por Cecilia Bueno, bajo la marca que lleva su nombre, buscan imponerse en el mercado sanjuanino. Cecilia y su hermana Carolina, que es ingeniera química, ganaron un subsidio de $250.000, uno de los 64 que otorgó el Ministerio de Minería para proyectos de minería artesanal en San Juan.

Plata, alpaca, bronce y cobre son los metales preferidos por la artesana junto a las piedras semipreciosas, como turquesa y lapislázuli, que ahora compra afuera pero que espera que gracias a este programa del Gobierno de San Juan para la pequeña minería pueda empezar a comprar a otros artesanos sanjuaninos.

«Nos enteramos del programa por un amigo y nos pusimos a investigar. Nos sumamos a los cursos y presentamos el proyecto. Gracias a este programa vamos a poder llevar a cabo esta pequeña empresa, de otra forma no podríamos  porque es carísima la maquinaria necesaria», explicó Cecilia.

Contaron que en los cursos participó mucha gente que nunca había hecho un proyecto y los técnicos y profesionales del ministerio tuvieron «muchísima predisposición para ayudarlos a todos».

La idea de las chicas es apostar a un proceso para fabricar joyas que, aseguraron, nadie hace en San Juan con circuito completo: fundición a la cera perdida.

Cecilia se encarga del diseño y elaboración de moldes y Carolina del proceso de fundición. «Lo lindo es que no se pierde la parte artesanal porque está el modelado de la cera a mano. Y por otro lado, el proceso productivo que nos permite hacer en serie y resuelve un problema de todos los artesanos que la producción. Este sistema vincula lo artesanal con lo industrial, conjuga ambas cosas», explicó Carolina.

Las chicas aún no recibieron los fondos pero las máquinas ya están pedidas, apenas esté disponible el dinero pasa derecho a la compra. Se trata de máquinas para el proceso de microfundición, insumos para el modelado en cera y capacitación.

“Con nuestro bolsillo empezamos a capacitarnos desde principio de año, en Buenos Aires y Córdoba, donde está Federico Rolla que es un artista que nos encanta. Este proceso es muy completo y hay muy pocas personas que lo hacen el país porque es muy caro acceder a las maquinas», señalaron las hermanas.

Pero tal vez la meta más ambiciosa es la de llegar a tener un salón propio, la primera joyería en San Juan con productos 100 % locales. «Hasta ahora en la provincia las joyerías revenden de joyeros que generalmente son de afuera, pero joyería sanjuanina no hay y esa es nuestra meta», aseguró Carolina.

Un hobby que dejó de ser

Cecilia empezó haciendo bijou como un juego a los 17 años. Se dio cuenta que le gustaba, que le salía bien y que podía dedicarse a esto. Empezó a capacitarse y hace 6 meses decidió asociar a su hermana ingeniera para que maneje el proceso productivo.

«Me gusta trabajar en plata principalmente porque  es más fácil, pero también trabajaremos con alpaca y otros metales, todo comprado en Buenos Aires pero en realidad el metal se importa de afuera. Sería un sueño poder trabajar con metales sanjuaninos. Sería fantástico poder comprar las piedras acá, una gran meta para tener un producto 100 % sanjuanino», confesó Cecilia.

El estilo de diseño de Cecilia es el brutalismo, «me gusta que se vea el mineral y que parezca mineral en bruto, lo mismo con las piedras».

 

La dupla ya probó producir regalos empresariales como llaveros, separadores, souvenir, y les fue muy bien, algo que planean profundizar cuando tengan las máquinas nuevas.

¿Precios? Habrá para todos los bolsillos en distintas líneas.  «Queremos entrar en el mercado de San Juan con precios accesibles y tendremos una línea económica de alpaca, cobre, bronce y piedras semipreciosas con productos desde 200 pesos, pero siempre artesanal. Luego habrá una línea de plata más costosa, promedio 1500 pesos, las maquinas nos permitirán mantener esos rangos», señalaron.

Por ahora la comercialización de la marca es a través de las redes sociales, en Facebook: Cecilia Bueno Joyería de Autor- Metalistería Artística, en el mercado artesanal y en poco tiempo también en Pura Cepa.

Mientras llegan las máquinas las hermanas están abocadas a mejorar el packaging y sumar a cada objeto una tarjeta que explique la pieza. «Cada pieza tiene una historia y cuando le explicas a la gente entienden mas el valor de lo artesanal y su significado», dijo Cecilia.

Carolina agregó que una mayor producción les brindará la posibilidad de sumar mano de obra, «en el futuro queremos ampliarnos y dar trabajo».

Tiempo de San Juan

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