Al oro no le ha sentado bien Donald Trump. Después de haber empezado 2016 como la materia prima más exitosa, las perspectivas del lingote han empeorado desde las elecciones, y los inversores están sacando dinero al ritmo más rápido en tres años.
A lo largo del mes pasado, los fondos cotizados en bolsa (ETFs, por sus siglas en inglés) respaldados por metales preciosos experimentaron una salida neta de 6,240 millones, al tiempo que los precios del oro caían a su punto más bajo en 10 meses, según datos recogidos por Bloomberg. Mientras que el capital salía, los fondos cotizados ligados al mercado de acciones tuvieron una entrada de 75,810 millones, lo que ayudó a catapultar el índice de Standard & Poor’s 500 a una cifra récord.
Mientras que los fondos cotizados de metales preciosos aún muestran una entrada neta para el año de más de 26,400 millones, el dinero comenzó a salir alrededor de las elecciones en Estados Unidos el 8 de noviembre. Los gestores de fondos están encontrando mejores retornos en otros sitios, en un momento en que las acciones y el dólar se encuentran en alza. Los rendimientos de los bonos del gobierno subieron gracias a las expectativas crecientes de que la Reserva Federal vaya a subir los tipos de interés. Todo ello hace que tener oro o plata resulte menos atractivo, porque no proporcionan dividendos.
«Sería difícil ir en contra del impulso» de la caída del oro y el alza de las acciones, opina Lara Magnusen, gestora de carteras en Altegris Advisors LLC, con sede en La Jolla, California.
El oro había estado en racha a lo largo de 2016 hasta que Trump salió elegido presidente. Antes, los precios habían subido un 20% y se dirigían hacia su primera ganancia anual desde 2012, entre indicios de que los tipos de interés seguirían siendo bajos. Esto ha ayudado a impulsar la inversión solo en fondos cotizados a largo plazo apoyados en metales preciosos, que ingresaron 13,600 millones durante el primer trimestre, el máximo en siete años, según datos reunidos por Bloomberg Intelligence. SPDR Gold Shares son los ETF de materias primas más exitosos.
Pero, tras una breve subida tras las elecciones, el panorama para el lingote se nubló. Los futuros del oro en Nueva York han caído un 8.1%, alcanzando su mínimo en 10 meses de 1,158.60 la onza el lunes. El compromiso de Trump para recortar impuestos e impulsar el gasto en infraestructuras para estimular el crecimiento económico de Estados Unidos ha sido considerado por algunos inversores como alcista para activos más arriesgados, como las acciones.
En noviembre, los inversores sacaron 4,670 millones de los fondos cotizados de metales preciosos, el máximo desde mayo de 2013, según muestran los datos recopilados por Bloomberg Intelligence. Este flujo de salida supera a las ganancias en energía, y resulta en pérdidas de 3,600 millones en la totalidad de fondos cotizados de materias primas.
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