El diputado por el pueblo de Río Turbio Darío Menna analizó la actualidad de nuestra localidad y del yacimiento, y cuestionó a la conducción de la empresa y a la del Concejo Deliberante. Dijo que “YCRT tiene que funcionar acá y no en Buenos Aires” y, en cuanto al Interbloque de concejales, remarcó: “Los empleados municipales están con medidas de fuerza por falta de dinero y ellos gastaron casi $400.000 en viáticos”.
El diputado por pueblo de Río Turbio, Darío Menna destacó que recientemente se convirtió en ley un proyecto elaborado desde su bloque, relacionado con la aplicación del botón antipánico en toda la provincia. Según comentó, un grupo de abogados y personal de la Comisaría colaboraron con esta iniciativa. “Sabemos que no va a solucionar los problemas de violencia de género en Santa Cruz, pero puede ser una herramienta importante para las víctimas, las comisarías y los juzgados. Ahora esperamos que se pueda reglamentar y que se pueda implementar lo antes posible”, subrayó.
-En cuanto al ámbito local, ¿está al tanto de lo que ocurre en el yacimiento y en Punta Loyola?
-Es un tema muy complicado, que viene desde hace mucho tiempo. En un primer momento, cuando Mauricio Macri ganó las elecciones presidenciales y se habló sobre la Intervención de YCRT, me puse contento por el nombramiento de Omar Zeidán, más allá de las diferencias políticas, porque es del pueblo y sabía qué significado tiene la empresa para la Cuenca. La verdad es que lamentablemente me equivoqué, porque estamos viviendo lo mismo que en el neoliberalismo de los años 90. Se denunció la totalidad de los convenios colectivos de trabajo, algo que no había pasado nunca. No hay diálogo, no hay comunicación ni inversiones. Se peleó mucho por el puerto de Punta Loyola; faltaban algunas cosas, pero nunca se dejó de lado como ahora. Quieren traer la piedra caliza por tierra. ¿Qué vamos a hacer con las familias de Punta Loyola y que dependen del puerto? El interventor dijo que se van a tener que trasladar a Río Turbio; están en Río Gallegos desde hace más de veinte años, pero se tienen que venir por un capricho. Entre Zeidán, el ingeniero Mario Capello y el diputado Eduardo Costa hay discursos contradictorios, dicen todos cosas distintas. ¿Quién dice la verdad? ¿Por qué la falta de diálogo con los gremios? Como diputado me junté dos veces con el interventor, una en Buenos Aires y otra cuando se acercó a la Cámara, y en esa ocasión no quiso que participaran los sindicatos. Cuando le pregunté por el plan de trabajo, no supo responderme.
-Hoy, el concejal Samir Zeidán y el interventor Omar Zeidán coinciden y afirman que, para discutir sobre lo inherente a la empresa, hay que hacerlo en Río Turbio. ¿Qué opina sobre esto?
-Que el interventor se acordó tarde de que la empresa tiene que funcionar en Río Turbio. Comparto eso, pero, ¿por qué convoca a todos en Buenos Aires y no acá? La única vez que me llamó para hablar, me citó en Buenos Aires. Estaría bueno también que el concejal Zeidán se interiorice sobre lo que sucede en la empresa, y ya que su hermano no dice lo que está pasando, que lo diga él. Que cuente qué pasó con el convenio que iba a firmar con Isolux el diputado Costa el 2 de mayo para la continuación de la Central Termoeléctrica. No se nota reactivación en el yacimiento, están todos muy callados. El discurso de Cambiemos es que todos se robaron todo, pero ellos están hace dos años en la gestión. Si se robaron todo, yo los acompaño a denunciar a quien sea, pero basta de discursos sin proyección política. Que empiecen a plantear propuestas.
-El 14 de junio se cumplirán trece años de la tragedia de Mina 5. Hoy, a las 10 horas, familiares y trabajadores se juntarán en el acceso a la usina para reclamar por su reanudación. ¿Cuál es su mensaje?
-Está más que claro, la gente y los familiares están pidiendo por todo aquello por lo que se peleó durante años. El pueblo de Río Turbio siempre luchó por la empresa, y del otro lado, hay incertidumbre, presiones y miedo. Esta no es la manera de manejar una empresa. Hay un claro ejemplo de lo que es el gobierno nacional en Río Turbio: despidos, ajustes, presiones, retiros voluntarios, denuncias de convenios colectivos.
-¿Qué opina sobre la polémica generada en torno al terreno supuestamente ocupado por la familia Zeidán?
-Yo pude hablar con representantes de la junta vecinal del barrio Las Margaritas y con el intendente Atanacio Pérez Osuna. La realidad es que el terreno es municipal, no hay ningún papel que diga que es de alguien. Nadie ha pagado los impuestos ni ha solicitado que se le adjudique ese terreno, pero hay allí una construcción muy avanzada, la cual tampoco tiene presentación de planos en la Municipalidad. Si hablamos de denuncias e irregularidades, esa es una gran irregularidad.
-El PIR pidió públicamente a Bacilio López que aclare la situación de una asesora que también trabaja como docente. ¿Qué postura toma sobre este caso?
-Comparto totalmente la solicitud del PIR. Para empezar a cambiar la política, las cosas se deben hacer así. Me parece bien que lo hayan hecho público y que le pidan al concejal que fue por su lista que modifique eso. Fue un buen gesto para hacer que la política sea más creíble.
-¿Cuál es su mirada sobre las gestiones hechas por los miembros del Interbloque del Concejo Deliberante en Buenos Aires?
-A mi me critican porque no salgo demasiado a hablar por los medios, pero yo tengo una concepción diferente sobre lo que es hacer política. No sé si es correcta o no, pero no salgo a decir que voy a conseguir tal o cual cosa, tal como lo vienen haciendo. Además no lograron nada, y eso no lo comparto, porque eso es generar falsas expectativas. Tenemos a los empleados municipales con medidas de fuerza por falta de dinero y ellos gastaron casi $400.000 en viáticos. Hablaron de las obras que consiguieron, pero casi todas vienen planteadas de la gestión anterior, lo único que tenían que hacer era generar los pagos. Que hablen del CIC de Julia Dufour; el intendente se comprometió a poner $700.000 y lo hizo, no como el gobierno nacional, que no mandó $1.700.000 que había anunciado. Que hablen de la casa terapéutica, de la deuda con Isolux. Es muy fácil salir a denunciar que todo lo que se hizo antes estuvo mal, así hace política cualquiera. No hablan sobre las cosas que importan, que son muchas, y en esto hago una autocrítica: sé que falta mucho del gobierno provincial, pero también hay que entender el ahogo financiero que sufre Santa Cruz. Nosotros pedimos un empréstito y no lo permitieron, cuando hay provincias que ya tomaron dos empréstitos en un año y medio.
-En referencia al empréstito, el gobierno ya lo autorizó, ¿no?
-No autorizó un empréstito, sino un crédito por Banco Nación de 750 millones de pesos en tres cuotas y un fideicomiso de 1200 millones en cuotas de acá a fin de año, que todavía no está firmado. Igual seguimos en la misma, nos tienen dando vueltas desde hace unos meses con esto. (Patagonia Nexo)
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