Son los Igualada, propietarios de la empresa de colectivos denunciados por presunta estafa con el gas oil subsidiado. Anunciaron que dejan el servicio.
La empresa San Francisco, operadora del servicio del transporte público en la capital riojana hasta hoy, quedó envuelta en un escándalo esta semana por presuntas maniobras con el gas oil subsidiado. Sus propietarios, los empresarios sanjuaninos Igualada, anunciaron que dejarán de operar y que este miércoles no operarán más el servicio.
La familia Igualada es sanjuanina y se dedica a los negocios en la provincia desde hace tiempo, desde un servicio diferencial de transporte puerta a puerta hasta convertirse en fuertes contratistas de la minera Barrick. Incluso, Juan José Igualada llegó hasta a presidir la Casemi, el nucleamiento empresario que reúne a los proveedores locales. El último rubro empresario en el que incursionaron en San Juan es el gastronómico, con un importante local de comidas rápidas en la peatonal.
En La Rioja, ganaron la licitación para el transporte público con la empresa San Francisco. Hasta que esta semana estuvieron en el medio de un escándalo desatado por el presunto pago de dinero en concepto de gas oil subsidiado en unidades que presuntamente no estaban transitando.
Según publicó el portal Rioja Libre, la acusación que pesa sobre los Igualada es que percibieron dinero de subsidios por unidades fuera de funcionamiento. El diario digital señala que los concejales riojanos pusieron documentación en manos de la justicia sobre eventuales pagos de subsidio al gas oil por59 millones de pesos enviados por la Nación para este año, para el funcionamiento de 70 colectivos.
Esa cantidad de colectivos en circulación es la que figura constatada por las autoridades municipales, cuyo aval es determinante para que sea enviado el subsidio. Es problema es que, según el medio, se constató que la cantidad de colectivos en circulación es sólo de 50, con lo que se habría estado enviando dinero por 20 unidades que no circulaban.
Por esa razón, quedaron en la mira de la justicia no sólo los empresarios sanjuaninos sino los empleados municipales que avalaron la cifra de colectivos en circulación.
El diario digital Rioja Libre indicó que el fin de semana se allanaron los galpones de la empresa San Francisco “para controlar las unidades”. Y que se dedujo que “20 colectivos no están en funcionamiento”. Señalaron que el personal del Departamento Logística de la policía instruidos por el comisario Marcelo Peralta hizo el procedimiento, del que surgió que las 20 unidades “presentan problemas mecánicos y faltantes de piezas y accesorios”. El medio cita fuentes judiciales que indicaron que el presunto desfalco “de 100 millones de pesos”.
Este martes, Juan José Igualada anunció en conferencia de prensa en el Hotel Talampaya que la empresa San Francisco deja el servicio de transporte riojano a partir de mañana. Mientras trabaja contra reloj en una solución, el municipio riojano anunció que la empresa debe notificar con 6 meses de anticipación si es que quiere rescindir el contrato, y que este miércoles se hará presente en la puerta de la empresa para obligarlos a prestar el servicio. Un escándalo que promete nuevos capítulos.
En la conferencia de este martes, los empresarios sanjuaninos no aludieron a esa investigación judicial sin a una presunta competencia desleal de la empresa Minibus.
“Venimos hace 18 meses tratando esto, que nos atienda el municipio y la verdad que sentimos que nadie nos da una solución y hemos tenido que llegar a una situación extrema por una cuestión económica, nosotros este mes tenemos que cerrarlo y nuestra gente es lo que más nos preocupa, son 160 familias que lamentablemente quedan en la calle”, sijo Juan José Igualada según el diario El Independiente.
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