En el marco del Programa Multilateral Cadena de Valor Minero, tanto en Jáchal como en Iglesia, los más jóvenes apuestan a la identidad productiva de sus padres.Mauricio Cepeda, su señora y una pareja amiga labran la tierra en Jáchal. De esos surcos inundados brotarán las cebollas, pimientos, tomates y berenjenas que trabajan en cooperativa.
Más allá, están los Aciar. Los hermanos Antonio y Rafael, el cuñado Héctor Luna y un amigo Javier Mallea embolsan las cebollas producidas por ellos. Los hijos de Rafael, Darío y Maximiliano, cargan los camiones.
Son 29 los productores que trabajan en familia en la Mesa de Gestión Productiva Jáchal. En Iglesia, son 12 productores asociados. En ambos departamentos, las nuevas generaciones se unieron en la identidad agrícola de sus padres gracias a la continuidad del Programa Multilateral Cadena de Valor Minero.
Hoy comercializan, con mucho orgullo, productos de excelente calidad con el Mercado Central de Buenos Aires por cuarto año consecutivo.
“Más allá de la parte productiva o comercial rescato que nos han unido, como productores, como familia”, opinó Alberto Varela, uno de los productores iglesianos del programa.
“Son las ansias de volver a la tierra con gente joven que nos sigue. Bah, que están al lado nuestro. Trabajan todos: el padre, el hijo, el primo; más algunos otros que se contratan por temporada. También se genera una mano de obra. Hemos sabido entender esta oportunidad y hoy estamos apreciando los resultados de esa unidad”, dijo Varela.