Lo dijo Alberto Carlocchia, presidente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM). Se manifestó en relación con la posible habilitación de la explotación minera en la Meseta del Chubut. “Nadie quiere que esto se haga mal, porque antes que mineros somos argentinos”, afirmó.
El presidente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), Alberto Carlocchia, se manifestó en relación con el posible inicio de la actividad minera en la Meseta del Chubut y, en este sentido, habló del necesario involucramiento, en los controles, de las universidades, como ha ocurrido en la vecina provincia de Santa Cruz donde la actividad se realiza desde el año 1998. “Nadie quiere que esto se haga mal, porque antes que mineros somos argentinos”, indicó.
“No hay nada mejor que generar la discusión, que haya consensos”, dijo Carlocchia en declaraciones a LU20 Radio Chubut, en relación con las voces de distintos referentes políticos, incluido el gobernador Mariano Arcioni, que en las últimas semanas se expresaron al respecto.
“Creo que es muy importante en la Argentina de hoy, y por lo que se está viviendo en cada una de las provincias, con las crisis en las que estamos inmersos, empezar a trabajar en la diversificación de la matriz productiva, no por la minería en sí, sino por las regiones del país y por la gente”, agregó.
En este sentido afirmó: “Los habitantes de cada una de las provincias necesitan alternativas con visión de crecimiento, de desarrollo personal, y de oportunidades. Todas las actividades productivas son generadoras de oportunidades. Y no tenemos que ver actividades como opuestas a otras, sino que debemos destacar la complementariedad y, sobre todo, aquellas que generan la cadena de valor de las actividades productivas”.
“En resumen -añadió- celebramos y estamos felices de que se pueda dar esa discusión. Ojalá que en un diálogo maduro pueda llegarse a un consenso para llevar adelante una actividad noble y ancestral como es la minería”.
Consultado acerca de las dudas planteadas por algunos sectores sobre el tema ambiental, explicó: “Cada vez que me lo preguntan de Chubut, les digo que miren cómo se desarrolló en Santa Cruz, que tiene una historia de más de 20 años de minería metalífera moderna”.
“Santa Cruz es la principal exportadora de minerales metalíferos de la Argentina. Tiene 8 proyectos en producción, diversas plantas de proceso trabajando desde el año 1998 cuando se instaló el primer emprendimiento que fue Cerro Vanguardia, donde tuve la suerte de participar”, recordó.
Allí, la actividad, dijo “se ha hecho con sumo cuidado, con mucho control cruzado porque ha tenido la oportunidad de participar la Universidad Nacional de la Patagonia Austral, como un auditor que monitoreaba el desarrollo de la actividad y su potencial relación con flora, fauna, agua, suelos, y demás”.
“Nadie quiere que esto se haga mal, porque antes que mineros somos argentinos”, afirmó en este sentido.
Y agregó: “Todas las actividades tienen potenciales zonas de riesgo que hay que mitigar y controlar, porque nadie quiere que esto se haga mal, y menos el que lo desarrolla, porque pone el doble y triple de empeño para que se haga bien”.
En relación con el rol de las universidades, ahondó: “Muchas veces están expectantes y por eso es importante llamarlas a participar, porque la academia es una pata muy importante en el desarrollo de cualquier actividad”.
“En Santa Cruz, la Universidad tuvo en algunos proyectos un rol de controlar: hacía un monitoreo de la evolución de determinados parámetros a partir de un informe de impacto ambiental, como un tercero especializado, para establecer una buena práctica”, explicó.
De todas maneras, dijo, “lo importante es que el control esté, porque el control le da transparencia a la actividad de la empresa y a la actividad del Estado. Creo que tenemos que buscar equilibrios, y que pueda apoyarse en un tercero para que exista algún control cruzado”.
Por último, acerca de la demanda de trabajo local, manifestó: “La minería requiere una mano de obra intensiva pero con cierta calificación. A una empresa le conviene mucho más tener trabajadores de las comunidades vecinas que del norte, donde la actividad minera tiene un desarrollo más acabado e histórico. Pero es necesario trabajar en conjunto para capacitar a la gente”.
“Alrededor de la habilitación de la actividad minera en la provincia del Chubut es necesario trabajar en conjunto entre la industria, el Estado a través de sus entes educativos, las comunidades, las cámaras; en generar la capacitación necesaria para que la minería sea una alternativa laboral para el ciudadano de Chubut, pero a su vez trabajar en la cadena de valor que puede desarrollarse en la provincia para poder soportar el crecimiento de la actividad”, finalizó.
ADN Sur