“En mi provincia voy a perder alrededor de 400 millones. Tendría que hacer malabares para ver con qué impuesto, a quién impacto para tener 400 millones más, amén de que no puedo pagar los aguinaldos”, dijo Rosana Bertone.
Un grupo de gobernadores desembarcó hoy en el Senado para manifestar su rechazo al proyecto opositor sobre el Impuesto a las Ganancias y la mayoría de ellos además pidió al Gobierno participar de una mesa de diálogo junto a partidos políticos con representación parlamentaria, a fin de elaborar una nueva propuesta.
A la reunión de la Comisión de Presupuesto de la Cámara alta concurrieron los gobernadores de Salta, Juan Manuel Urtubey; de Tierra del Fuego, Rosana Bertone; de Neuquén, Omar Gutiérrez; de Río Negro, Alberto Weretilneck; de Jujuy, Gerardo Morales; de Córdoba, Juan Schiaretti, y el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli.
Todos ellos manifestaron su rechazo al proyecto que recibió sanción en Diputados a través del impulso de los bloques del Frente Renovador y el Frente Para la Victoria, con la excepción del chubutense Mario Das Neves, cercano al diputado Sergio Massa, que pidió su aprobación.
El primero en hablar fue Urtubey, quien subrayó que “la consecuencia” de la iniciativa opositora “es profundizar el desfinanciamiento de las arcas provinciales”, tras señalar que “en Salta la gran lucha es contra la pobreza” y que para ello se necesita “una fuerte presencia del Estado”.
“Yo sostengo la necesidad del Estado presente y para tenerlo hay que tener financiamiento. Con esto, lo que se va a hacer es bajar al máximo la presencia del Estado”, agregó el gobernador salteño. Por su parte, Bertone recordó los graves problemas fiscales que atraviesa Tierra del Fuego y señaló: “En mi provincia voy a perder alrededor de 400 millones. Tendría que hacer malabares para ver con qué impuesto, a quién impacto para tener 400 millones más, amén de que no puedo pagar los aguinaldos”.
El neuquino Omar Gutiérrez afirmó ante la Comisión de Presupuesto que “la contrapartida” del proyecto “es menos recursos en cabeza del fisco nacional y provincial, recursos que promueven el desarrollo social”.
“Espero que se consiga la mejor ley, que sea viable, que refleje el encuentro entre lo que podemos y lo que queremos”, pidió el gobernador de Neuquén.
El rionegrino Alberto Weretilneck, en tanto, pidió a los senadores que “tengan a bien revisar la sanción de Diputados” y agregó: “Necesitamos que de este debate surja una negociación entre las provincias, la Nación y el movimiento obrero”.
A su turno, Gerardo Morales advirtió que “en función de la situación de Jujuy, no es momento de tratar Impuesto a las Ganancias” porque el proyecto “impacta de una manera importante” en su provincia.
Pero en línea con lo que expresaron sus pares, manifestó que hay “presdisposición de todos los gobernadores para buscar una alternativa y una respuesta a todos los trabajadores”.
Schiaretti, en tanto, se sumó a las críticas al afirmar que “el proyecto que tiene sanción de Diputados no soluciona la dificultad de la distorsión, sino que la profundiza”, mientras que Santilli sentenció: “Es absolutamente regresivo, distorsiona los ingresos de la Ciudad de Buenos Aires”.
El único de los gobernadores invitados que respaldó el proyecto fue Das Neves, quien explicó que en su provincia “a casi el 50 por ciento de los trabajadores les impacta negativamente el Impuesto a las Ganancias” y afirmó: “Está claro que mis senadores van a votar la sanción de Diputados”.
El mandatario chubutense dijo que “duda de los números” que planteó el Gobierno en sus críticas a la iniciativa de la oposición debido a la “improvisación” que, a su entender, mostró el Ejecutivo con el tema de los aumentos de tarifas.
Más tarde, cuando ya se conocía que el proyecto no había recibido dictamen de comisión en el Senado, la mayoría de esos gobernadores (Urtubey, Schiaretti, Bertone, Gutiérrez y Weretilneck), más Miguel Lifschitz (Santa Fe), Sergio Uñac (San Juan), Domingo Peppo (Chaco) y Gustavo Bordet (Entre Ríos) se reunieron en un hotel del centro porteño.
Allí, todos ellos acordaron un pedido a la Casa Rosada para que ponga en marcha una mesa de diálogo con los gobernadores y los partidos políticos con representación parlamentaria para elaborar una nueva iniciativa para modificar Ganancias.
“Hay que salir de la falsa dicotomía entre los salarios de los trabajadores y las cuentas de las provincias. Pedimos al Gobierno que convoque a una mesa a los gobernadores y fuerzas políticas con representación parlamentaria para consensuar un nuevo proyecto de Ganancias”, sostuvo Schiaretti en declaraciones a la prensa al retirarse de ese encuentro.
Por su parte, Urtubey llevó a la reunión una propuesta propia para elevar el piso del mínimo no imponible a 48.600 pesos para una persona casada con dos hijos y que además contempla no gravar la minería ni los plazos fijos pero sí el juego.
