El intendente de Río Turbio, Atanacio Pérez Osuna le reclamó al Gobierno central una mirada más federal. En este sentido, reclamó la rápida puesta en funcionamiento de la mina y la usina, de la que dependen miles de familias. El funcionario también analizó la política energética y los aumentos de tarifas.
Atanacio Pérez Osuna llegó a Río Turbio hace 42 años, el 19 de mayo de 1974, desde un pueblo chiquito de Chaco, con no más de 8000 habitantes. No es un nacido y criado en La Patagonia pero aprendió a trabajar bajo la inclemencia de su clima. Trabajó en la planta depuradora de la ciudad, en el primer turno (de 06:00 a 14:00), aprendió a hacer mantenimiento e incluso estuvo en la parte de producción de la mina. “Es difícil la cuenca con 15 o 20 grados bajo cero. Y hay que ser minero, cuando estás ahí abajo con la única luz de la lamparita de su casco. Cuando bajas, llegar a tener 27 grados y cuando salís, menos diez. Hay que estar para saber”, afirmó el Intendente, que desde hace 28 años viene sometiéndose a la voluntad popular de Río Turbio.
El presidente de la Nación, Mauricio Macri, sostuvo que “según sus asesores”, el carbón de Río Turbio no servía para la alimentar la usina. Usted qué opina?
Que el carbón no sirva es totalmente falso. Nosotros vendíamos el carbón a una usina de San Nicolás sin ningún problema y estamos hablando de un recurso con 5700 kilocalorías, que es lo que necesita la usina. Además posee bajo contenido de azufre. No contamina. Es evidente que le están haciendo llegar mal la información.
¿Quién sería el responsable, Omar Zeidán, el actual interventor?
No puedo acusar a nadie. Lo intenté llamar a Zeidán el otro día, no lo encontré. Hablé con Francisco Roldán y le dije que desde la intervención tenían que salir rápidamente a explicar la situación. El lunes (de la semana que pasó) sé que presentaron un informe técnico al ministro Aranguren sobre las características particulares del carbón de la mina. Nosotros vamos a realizar nuestro propio informe técnico. Ya hablé con los distintos sindicatos, con Luz y Fuerza, ATE, La Fraternidad, y la Universidad de Río Turbio para llevar adelante nuestro propio estudio. Durante 70 años le vendimos a San Nicolás sin problemas. No hay ninguna necesidad de comprarle el carbón a Chile. Una buena pregunta sería quién está haciendo lobby para comprar carbón al país trasandino.
Actualmente, algunos “ecologistas” de Greenpeace forman parte del Ministerio de Ambiente. ¿Puede haber un lobby ambientalista detrás del freno en las obras?
Esperemos que no. Cuando Néstor Kirchner estaba en el gobierno hicimos varias asambleas y siempre aparecían los ecologistas para decirnos que no había que usar el carbón. Pero la verdad es que no quiero pensar que detrás de todo esto haya quienes quieran hacer algún negocio. No quiero pensar que el Presidente esté mal informado o que nos quieran quitar la empresa.
¿Cree que para desprestigiar a la mina y al carbón que ésta produce se dijo que YCRT debía reconvertirse para funcionar a gas?
Me enteré el año pasado de esos planteos. En realidad, lo que se hizo fue enviar una nota desde YCRT consultando si la usina podía llegar a funcionar de manera dual. Cuando uno ingresa en el sistema interconectado de CAMMESA, si un día no inyecta energía las multas que te cobran son altísimas. Entonces, ante cualquier circunstancia de la mina, como un movimiento, o la rotura de un equipo, hay que dejar de producir y eso le generaría a la empresa un altísimo costo en multas. Por eso se pensó en la posibilidad de funcionar de manera dual, como ocurra en muchas partes del mundo.
Desde la actual intervención se manifestó que la mina estaba en malas condiciones, con problemas de seguridad. ¿Cuál es el estado actual del yacimiento?
Hay cuatro frentes listos para explotar, el tema es que hay que finalizar la cinta de 6 kilómetros para extraer el carbón de los frentes largos. La empresa Isolux es la que tiene que hacer ese trabajo. Si el Gobierno pone los recursos necesarios, en 70 días puede terminarse. Y si hubo algún derrumbe como sostiene Zeidán, fue en una cola muy al fondo, sencillo de solucionar. Hoy por hoy no existe ningún inconveniente para producir.
¿Pudo hablar personalmente con Zeidán?
Hace casi un mes, durante quince minutos. Le dije que no tenía problema en colaborar, contarle lo que habíamos hecho durante mi intervención en YCRT. No tengo nada que esconder. Desde hace 42 años vivo en esta comunidad, y es la tercera vez que soy Intendente, y fui varias veces electo Diputado. Más allá de los errores que uno pueda tener, nunca actué maquiavélicamente. Acá hay que buscar soluciones para toda la comunidad. El carbón de la mina es excelente, tenemos reservas para explotarla por 400 años. Hay que mantener la empresa abierta. Incluso, Néstor Kirchner, cuando pensó el proyecto, dejó un terreno específico para poder agregarle un tercer módulo de 120 megas o incluso dos módulos más. Si al yacimiento le va bien, al comercio, a los empleados municipales, a los médicos, a todos les irá bien. Sino, todo se irá a pique como en el ´94.
En la década del ´90, la Patagonia se volvió inviable de la mano del menemismo, con la privatización de YPF, y el cierre de los ferrocarriles. ¿Qué pasó en esos años con YCRT?
Éramos 5600 trabajadores y quedamos 1500, las casas se regalaban, todo se caía a pedazos, literalmente. No queremos volver más a una etapa así. Si la mina se achica o cierra, ojalá que nunca pase, somos 50.000 familias que no tendremos posibilidades de nada. Sería bueno que Macri vea las cosas con otra mirada, que sea más federal, que a pesar de que estamos lejos del centro de poder, también somos argentinos. Quizás si miramos todo desde una perspectiva economicista no seremos muy rentables, pero sí desde lo social.
¿Cree que el Gobierno nacional carece de una mirada social?
Vemos que sí. Tengo que ser honesto, nosotros en Río turbio no vamos a aceptar ningún despido. Somos argentinos radicados en este lugar, hemos decidido vivir acá, hay generaciones enteras. No nos olvidamos cuando Perón tomó la decisión estratégica de explotar el carbón como una cuestión de relevancia geográfica, política y social. Ahí fue cuando empezamos a vender a Bahía Blanca, San Nicolás. El concepto era que las familias pudieran vivir de su trabajo en la mina, que los hijos pudieran estudiar.
Carbón limpio
En Argentina predomina la energía generada a base de gas, pero en Estados Unidos, por citar un ejemplo, el 45 por ciento de su generación eléctrica es a base de carbón.
Una de las claves del proyecto de YCRT es la tecnología que utiliza. Su particularidad es que fue diseñada con un sistema de calderas adaptadas para quemar el carbón en estado puro (directo de la mina), cuando la mayoría de estos establecimientos trabajan con el mineral purificado (refinado y lavado), lo cual produce fuerte contaminación de los ríos.
Es decir, el carbón que se extrae de la mina es un 50 por ciento mineral puro y otro 50 por ciento de material estéril. La caldera puede quemar el carbón sin la necesidad de la limpieza. El agua que utiliza forma parte de un circuito cerrado, es decir que no se genera ningún gasto continuo de este recurso. Tampoco hay emisión de Co2. Y se implementó un sistema de captura de azufre para evitar las lluvias ácidas. Alemania, Polonia, España y Chile son los únicos cuatro países del mundo que operan con esta clase de centrales.
«Con el lanzamiento del Plan de Recuperación Integral del Yacimiento Carbonífero de Río Turbio se reactivaba la exploración y explotación del carbón mineral. Entre sus dos metas fundamentales estuvo la construcción de la Central Termoeléctrica y la recuperación integral del yacimiento, con la finalidad de abastecer a la usina y exportar el excedente. A diciembre de 2015, el Plan de Recuperación invirtió cerca de 10.000 millones de pesos», explicó el bioquímico Federico Bernal.
Importación y aumento de las tarifas
¿Y cómo juzga la política de importación de energía de Aranguren?
Si es cierto que no hay gas o que no están dadas las condiciones para la producción local, está bien que se importe pero las empresas deben invertir lo necesario para generar los recursos que la Argentina necesita. Por eso, si necesitamos energía, el Gobierno debe terminar la usina, poner en funcionamiento la mina, arrancar con la construcción de las dos represas. Si frenan ambos proyectos, claramente la señal que dan es que no quieren solucionar el problema energético. Desde Santa Cruz podemos generar energía para todos los argentinos.
Ya que mencionó el tema del gas, ¿cómo afectará el aumento en los habitantes de Río Turbio?
La gente está más que preocupada, no sólo por todos los aumentos sino por el impacto que tendrán las nuevas tarifas en la canasta familiar. Hay preocupación, malestar. Nadie esperaba esto, a pesar de que el aumento en el agua y la electricidad lo banca la provincia. Pero lo peor recaerá sobre los comerciantes, que no tienen subsidios y encima tienen que absorber el costo del gasoil por el flete. Los precios en Turbio son más caros que en Gallegos. Ya hay vecinos que se organizan y viajan a la capital de la provincia a realizar compras mayoristas.
¿Van a impulsar desde la municipalidad algún amparo para frenar los aumentos en las tarifas?
El Concejo Deliberante está buscando firmas para realizar algún tipo de presentación formal en la justicia. Los diputados y senadores nacionales también hicieron presentaciones (N.d.R: la semana pasada en esta columna se hizo un repaso sobre las distintas iniciativas legislativas que buscan frenar el tarifazo). Las nuevas tarifas violan la ley, ya que no se hizo ninguna audiencia pública como marca la regulación. Esperemos que haya algún juez que se la juegue y frene el tarifazo.
Claves
*La usina fue diseñada para trabajar con dos módulos de 120 megavatios cada uno.
*Con la generación de 120 Megas podría abastecerse toda la demanda de la provincia.
*El avance de la obra de la usina ya supera el 80 por ciento.
*Los trabajadores involucrados en la mina ascienden a 2600, más 1400 abocados a la construcción de la usina.
*Las familias que dependen del proyecto de la termousina son 50.000.
*El carbón que genera la mina es de 5700 kilocalorías
*Es un mineral bajo en azufre, por lo que no genera efecto invernadero ni lluvia ácida.
*Las reservas probadas de la mina alcanzan
las 427 millones de toneladas
*Las reservas estimadas ascienden a 700 millones de toneladas
*El funcionamiento normal de la planta requerirá 1,2 millón de toneladas del mineral por año.
Tiempo Sur